He visto recientemente la miniserie Chernobyl, escrita y producida por Craig Mazin, en HBO y Sky Atlantic, y la verdad es que me ha dejado bastante tocada.
Poco sabía yo de la catástrofe de la central nuclear de Chernobyl el 26 de abril de 1986. Así que solo por saber, tenía que verla, aunque también influyeron las críticas positivas que en poco tiempo había recopilado la serie.
Son solo cinco capítulos, de más de una hora cada uno, mas bien lentos, pero intensos. La lentitud en las series puede matarte de aburrimiento o puede atraparte y carcomerte hasta el siguiente capítulo. A mi me ha pasado lo segundo. Verla por la noche antes de dormir me desvelaba y me dejaba traspuesta por unas horas.
Básicamente por dos motivos:
- Me encantan los actores, Jared Harris, Stellan Skarsgård y Emily Watson. Fenomenal actuación. Los personajes son trabajados episodio a episodio y van creciendo a medida que se desarrolla la trama.

2. Y sobretodo… Destaco la trama: desgarradora, catastrófica, oscura. Un dramón. La peor catástrofe nuclear del mundo. Uno no se puede creer que sea cierto cómo se vivió allí el suceso, y en todo el mundo, dadas las circunstancias políticas del país. Las mentiras de la Unión Soviética repercutieron en el bienestar de todo el planeta.
No hay que ser muy ducho en energía nuclear, se puede leer sobre el tema (o ver la serie), para entender las grandes repercusiones de esta en el medioambiente y finalmente los humanos.
En España tenemos estas:

Pero en Francia tienen ¡más de 50! Nuestros vecinos dependen en gran mayoría de la energía nuclear. Y nosotros la compramos…
Si antes ya me preocupaba por consumir energía limpia, ahora aún más.
#ChangeTheEnergy
#NotTheClimate
#EnMarchaPorElClima