Ya hace tiempo, y cuando digo tiempo digo meses, que quiero escribir sobre un libro que me leí a finales del año pasado (con la calma).

Estaba yo un día hablando con mi ex-jefe sobre la crisis, maneras de resolverlo, el cambio, el futuro, mi sueño de vivir en un lugar autosuficiente y con lo mínimo… y me vio tan utópica e idealista como uno de sus antiguos profesores, Santiago Niño Becerra, catedrático de Estructura Económica de la Facultad de Economía IQS (Universitat Ramon Llull), así que me recomendó leerme su libro “La crisis del 2010” de ediciones, escrito en el 2008.

De economía yo no tengo ni idea, la verdad, no me estoy comparando, pero a través de las páginas de su libro, he aprendido algo y también me he dado cuenta que ser parte de una familia numerosa algo bueno tiene.

Entre muchas de las cosas interesantes de las que dice, ahí va este parrafón, en la página 130.

“En una dinámica tendencial de escasez de recursos y de gasto a la baja, las actividades vinculadas al aprovechamiento y a la optimización van a tener amplio recorrido. Profesiones relacionadas con la rehabilitación de todo tipo de elementos, con la recuperación, la reparación y la reutilización de bienes que hasta ahora eran desechados, así como el reciclaje de artículos que hoy son considerados desperdicios y, por tanto, no son aprovechados, van a tener el éxito asegurado, para constituir el que puede ser denominado  el sector R.

Primará la idea de reutilización, concepto de barato, de outlet, de mercadillo, de útil, en definitiva, tanto porque las cantidades de recursos disponibles van a ser escasas como porque las rentas individuales medias van a sufrir un importante retroceso, a la vez que la capacidad de endeudamiento personal prácticamente desaparecerá.”

Hay muchos campos en que aplicarlo y no es que me venga de nuevo, solo hay que ponerlo en práctica.

 R-usar: recopila lo que no te pones y dalo. A quien, qué más da.

 R-cicla, R-cupera R-para: relájate destrozando cosas y transfórmalas en algo nuevo

CULTURA R