El Hombre y yo normalmente hacemos la compra juntos y a veces discutimos sobre qué comprar y normalmente se trata de las ofertas. Él dice “Son 5 por 2€ o 3×1 está muy bien”. A lo que yo contesto algo como “Pero no lo necesitamos, no lo comeremos...”

Y aquí viene cuando tienes que ser pillo con las ofertas.
Si es comida envasada, en conserva, básicos o congelados, serán siempre bienvenidos. Cuando se trata de productos frescos, ya la cosa cambia. Pero ¿sabéis qué? Que nos encanta nuestro congelador.

A decir vedad lo he aprendido de mi madre, que tiene dos congeladores más un arcón (para una familia de nueve).
Nosotros, a pesar de ser solo dos, hemos encontrado la manera de aprovechar las ofertas y además ahorrar tiempo a la hora de cocinar. Después de la compra al por mayor, viene el corte al por mayor, también.

Y luego a envasarlo y congelarlo, simple.

Puedes hacerlo con pimientos, calabacín, setas, cebollas, ajo, zanahoria… Yo evitaría las patatas, ya que no se congelan muy bien debido al almidón o alimentos con alto contenido de agua, como el tomate, el pepino o la lechuga.

Y cuando tengas que cocinarlo, lo más engorroso ya lo has hecho.