Está claro que hay mucha gente que pasa hambre. Y no hay que ir muy lejos para conocerlos. En tu mismo país, tu propia ciudad, hay gente que come menos de una comida al día y necesita de organizaciones y voluntarios para comer diariamente. Las cifras de hambruna en España son perturbantes. Y se sigue tirando aproximadamente un tercio de la comida que se produce.
Por suerte, contamos con el trabajo de organizaciones como el Banco de Alimentos, entre muchas otras, y la cooperación y la buena voluntad de muchos ciudadanos.
Pero el desperdicio de comida empieza en nuestro hogares. El saber cocinar y organizar tus compras y comidas puede reducir tus gastos en la cesta de la compra, además de contribuir a paliar un problema mundial.
Hay muchos consejos sobre cómo hacerlo. Aquí te dejo algunos:
1. Planea tus menús con antelación. Si necesitas ayuda, busca recetas por internet. Incluso encontrarás menús ya planificados.
2. Hazte listas de la compra. Compra solo lo que necesites y a ser posible de temporada.
3. Saca partido a las ofertas del supermercado. Y aprende a congelar alimentos que preveas que no vas a utilizar, tanto cocinados como frescos.
4. Las fechas de caducidad, suelen ser una aproximación. Fíjate bien en ellas mientras estés haciendo la compra y coloca tus alimentos con fecha de caducidad más cercana en la primera fila de tu nevera para consumirlos antes.
5. ¡Échalo todo, niñ@! Usa las verduras y frutas más viejas y maduras para hacer sopas, cremas, al horno o batidos deliciosos.
6. Sírvete y come la porción que necesitas. Esto ayudará a tu salud y a la de tu bolsillo.
Todo estas ideas son pequeñas soluciones que cambiarán grandes problemas.